enero 04, 2013

...comunicándonos...

...palabras, silencios, gestos con las manos, la forma de caminar, la entonación de la voz... todo comunica... queramos o no cada uno de estos aspectos está transmitiendo información. A veces no la que queremos, pero algo sucede en el otro o los otros al recibir este mensaje que hemos enviado incluso sin querer...

Sin embargo también ocurre que podemos estar frente a otro, que no logra percibir algunos de estos mensajes y entonces las palabras se convierten en la manera de transmitir lo que pensamos, lo que queremos, lo que nos gusta y nos disgusta. Palabras que tantas veces también nos pueden enredar... ¿cuántas veces sucede que terminamos una buena conversación en discusión, tratando de aclarar lo que quisimos decir?

Las palabras pueden tener la magia de ayudarnos a comprender, pero también de desanimarnos, nos pueden ayudar a encaminarnos haca el logro de un sueño o desecharlo... y a veces son palabras pequeñas... cortas, pero con un gran poder! Si no lo crees, prueba con este sencillo ejercicio:

Plantea algo que quieras hacer, pero sobre lo cual tengas alguna duda... por ejemplo: "Quiero aprender a bailar o hacer deporte o bien comenzar una dieta". Cualquiera de ellas, u otra que para ti tenga sentido. Ahora agrégale la palabra "pero" y completa tu decreto... "Quiero hacer deporte... pero me da lata, sale caro, no tengo tiempo, etc."

Veamos qué sucede cuando en vez de pero colocas un "y"... "Quiero hacer deporte... y me da lata, sale caro, no tengo tiempo, etc." ¿Notas alguna diferencia en tu actitud, en tu energía interior?

Y ahora prueba con lo siguiente: "Quiero hacer deporte... aunque me da lata, sale caro, no tengo tiempo, etc." ¿Qué es lo diferente?

Una palabra, una simple palabra y podemos experimentar las cosas de tan diferente manera...